La Vacuna de la Leishmania

Efectividad, Seguridad y Recomendaciones

La controversia que ha generado la vacuna contra la leishmaniosis, junto con la información que circula en Internet en su contra, ha creado un intenso debate sobre si se debe o no vacunar a los animales contra esta enfermedad.

El propósito de este artículo es presentar las conclusiones de los estudios médicos serios e imparciales que existen sobre ella.

Efectividad de la Vacuna de la Leishmania
Para entender qué hace la vacuna de la Leishmania, es importante explicar que esta enfermedad ha estado presente en nuestros perros durante mucho tiempo. Muchos perros son picados por el mosquito transmisor, y aunque se infectan, son capaces de superar la infección sin mostrar signos de enfermedad.

Sin embargo, no siempre ocurre así, y muchos perros no responden adecuadamente a la infección, desarrollando la leishmaniosis clínica. Aquí es donde entra en juego la vacuna de la leishmania; enseña al perro a responder adecuadamente contra la enfermedad, evitando que desarrollen la enfermedad clínica, aunque no evite la infección.

Dos estudios de campo respaldan la efectividad de la vacuna de la leishmania:
Uno de ellos muestra que, comparando perros vacunados con no vacunados, los perros vacunados tienen una menor carga parasitaria que los no vacunados. Además, los perros no vacunados tienen una mayor probabilidad de desarrollar la enfermedad clínica, y todos los casos graves se dieron entre los perros no vacunados.

Otro estudio demostró que en una zona de alto riesgo de contagio, durante un período de 2 años, el 72% de los perros no vacunados tenía anticuerpos contra la leishmaniasis, mientras que entre los perros vacunados, solo el 57% tenía anticuerpos.

Estos estudios respaldan el uso y la recomendación de la vacuna de la leishmania.

Seguridad de la Vacuna de la Leishmania
Existen estudios experimentales y de campo en los que se ha administrado la vacuna hasta 4 veces sin que aparezcan complicaciones graves. Sin embargo, la fiebre, la inflamación en el punto de inoculación de la vacuna y los trastornos digestivos son posibles efectos secundarios.

Recomendaciones
Nuestra posición respecto a la vacunación contra la leishmaniosis es que SÍ recomendamos la vacunación de los animales, pero es importante tener en cuenta varios puntos:

  • La vacuna protege frente a la enfermedad clínica, no frente al contagio.
  • No se debe prescindir de los métodos que SÍ evitan el contagio, como los collares y pipetas veterinarias.
  • La vacunación debe ir siempre acompañada de medidas adicionales de protección, como el uso de collar o pipeta, para garantizar una protección casi completa.

En resumen, la vacuna de la leishmania es una herramienta importante en la prevención de esta enfermedad, pero es fundamental complementarla con otras medidas para una protección óptima de nuestras mascotas.